Gálatas 6:1-18
6:1 Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.
6:2 Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo.
6:3 Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña.
6:4 Así que, cada uno someta a prueba su propia obra, y entonces tendrá motivo de gloriarse sólo respecto de sí mismo, y no en otro;
6:5 porque cada uno llevará su propia carga.
Estamos para restaurar, (reparar o arreglar) para estar en comunión con aquellos hermanos que son atrapados en un pecado. Esto debe hacerse con mansedumbre y humildad sabiendo que tú puedes caer en alguna ocasión también. En este proceso de restaurar, asegúrate de mirarte a ti mismo de tal manera que no caigas en el mismo pecado también. Necesitamos crecer en Cristo juntos, y esto incluye ayudarnos unos a otros a superar los hábitos pecaminosos. Aquellos cristianos que son maduros son responsables de los que son débiles.
Somos llamados a llevar las cargas los unos de los otros. Esto significa cargar la carga con tu hermano. Debemos ayudaros el uno al otro en esta vida. ¡No estamos destinados para vivir solos! Este es uno de las maneras de cumplir la ley de Cristo, la Ley del amor (Juan 13:34). El legalismo no es lo mismo en su manera de pensar; nada muestra más la debilidad del legalismo que cómo los legalistas tratan a aquellos que han pecado. Ellos simplemente atacan con reglas; no hay cuidado o amor, simplemente un mandamiento impetuoso de las reglas. Si traemos junto a nosotros a alguien en esta vida para cuidarnos y damos cuentas, la probabilidad de pecar es mucho menor.
El legalismo piensa en traer a otros junto a uno simplemente para hacer más de sí mismo. ¡Si los legalistas pueden hacer que la otra persona se vea mal, ellos se mirarán mejor! El dar cuentas nos permite mantener un modo de pensar estable acerca de nuestras situaciones y de nosotros mismos. Necesitamos mantener a alguien a nuestro lado de la manera correcta, para darnos otra perspectiva, para ayudarnos cuando estamos abajo. Esto nos permite ayudar a esa persona del mismo modo. ¡De esta manera cumplimos la ley de amarnos los unos a los otros!
6:6 El que es enseñado en la palabra, haga partícipe de toda cosa buena al que lo instruye.
6:7 No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.
6:8 Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.
6:9 No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.
A los creyentes se le dice que compartan sus vidas (esto incluye talentos, tiempo y dinero) con sus líderes / pastores / ancianos. La idea de dar libremente a un pastor era revolucionaria en ese entonces para los judíos. A los judíos se les impuso pagar el impuesto a sus sacerdotes; dar a los pastores era una ofrenda libre, no un mandamiento. Los pastores también son llamados para venir junto a otros creyentes y enseñarles. Juntos, la iglesia está para cuidar de los unos a los otros.
Si un cristiano está solo, la tentación de darse por vencido y caer en pecado es mucho más grande que si el creyente está con un grupo de creyentes. Somos llamados a ayudarnos unos a otros. Los cristianos nunca deberíamos tener la actitud “más santo que tu”, especialmente cuando ellos están ayudando a otro hermano, porque cual quiere Cristiano puede caer en cual quiere tentación.
Dios no puede ser engañado por alguna excusa que nosotros demos. Sea sacrificial o espiritual o simplemente tontería. Tú siempre cosechas lo que siembras. Si siembras semilla espiritual, recibirás fruto spiritual; si siembras semillas carnales, recibirás carnalmente, disgustos, corrupción, fruto podrido. No solo cosecharás lo que tú sembraste, tú siempre cosecharás más de lo que tú sembraste.
Aquellos que apelan a la carne y la siguen recibirán destrucción y corrupción. Cuando alguien dice “si” al pecado en su corazón, o en su mente o en sus acciones, ellos están plantando semillas de la carne. Por cuando decimos si a la obediencia amorosa, nosotros plantamos semillas del Espíritu. Esto puede ser hecho con amor. Es muy importante tener una mentalidad celestial cuando damos de nosotros mismos, de modo que no crezcamos fastidiados.
Definitivamente debemos estar dispuestos a continuar trabajando el bien que tenemos por delante. ¿Cuándo es el tiempo para esto? Ahora y ahora. Recuerda no tenemos garantizado otro segundo. Dios nos ha puesto aquí por una razón; tomar la oportunidad de amar a nuestro prójimo y amar a aquellos que están perdidos. Especialmente necesitamos hacer el bien con aquellos que están dentro de la familia de Dios, aquellos que están dentro de la iglesia.
6:11 Mirad con cuán grandes letras os escribo de mi propia mano.
6:12 Todos los que quieren agradar en la carne, éstos os obligan a que os circuncidéis, solamente para no padecer persecución a causa de la cruz de Cristo.
6:13 Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley; pero quieren que vosotros os circuncidéis, para gloriarse en vuestra carne.
6:14 Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.
6:15 Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale nada, ni la incircuncisión, sino una nueva creación.
6:16 Y a todos los que anden conforme a esta regla, paz y misericordia sea a ellos, y al Israel de Dios.
6:17 De aquí en adelante nadie me cause molestias; porque yo traigo en mi cuerpo las marcas del Señor Jesús.
6:18 Hermanos, la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu. Amén.
Pablo menciona que el escribe en grandes letras, esto probablemente signifique que Pablo mismo ha tomado la pluma en lugar de su secretario. También puede significar que él escribe en grandes letras debido a una enfermedad de los ojos. También puede ser que Pablo escribió la conclusión entera en letras capital por el bien del énfasis.
Aquellos que son legalistas son basados en obras. Su mentalidad es tener convertidos para hacerse ver mejor a ellos mismos. ¡Ellos desean jactarse acerca de sus obras! Ellos ven la verdad, pero no quieren ser perseguidos por sus compañeros. Pablo menciona que ellos mismos no cuidan toda la Ley, ¡porque es imposible!
Pablo, por el otro lado, no le interesa jactarse de sí mismo sino solo de Cristo. La circuncisión o incircuncisión no importan porque tan pronto como la salvación ocurre hay una nueva creación echa por Dios. El mundo no tiene poder sobre un cristiano porque nosotros estamos muertos a él. La Cruz fue un objeto de vergüenza para los judíos, pero para Pablo y para los cristianos es un objeto de gloria.
Pablo termina con un mandamiento para que ninguno lo moleste con falsos testimonios ya que él ha sido perseguido y trae las marcas en su cuerpo. Su prueba final fueron las marcas sobre su mismo cuerpo que él ha terminado perseguido por la verdad. Él menciona sus despedidas y termina su carta a los Gálatas.
¿Has visto como la ley no da la medida? No es a través de las tradiciones, obras o ir a la iglesia. Es solo a través de la Cruz y de la gracia de Cristo. Espero que este estudio te ayude a afirmar la verdad en tu misma vida.
6:1 Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.
6:2 Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo.
6:3 Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña.
6:4 Así que, cada uno someta a prueba su propia obra, y entonces tendrá motivo de gloriarse sólo respecto de sí mismo, y no en otro;
6:5 porque cada uno llevará su propia carga.
Estamos para restaurar, (reparar o arreglar) para estar en comunión con aquellos hermanos que son atrapados en un pecado. Esto debe hacerse con mansedumbre y humildad sabiendo que tú puedes caer en alguna ocasión también. En este proceso de restaurar, asegúrate de mirarte a ti mismo de tal manera que no caigas en el mismo pecado también. Necesitamos crecer en Cristo juntos, y esto incluye ayudarnos unos a otros a superar los hábitos pecaminosos. Aquellos cristianos que son maduros son responsables de los que son débiles.
Somos llamados a llevar las cargas los unos de los otros. Esto significa cargar la carga con tu hermano. Debemos ayudaros el uno al otro en esta vida. ¡No estamos destinados para vivir solos! Este es uno de las maneras de cumplir la ley de Cristo, la Ley del amor (Juan 13:34). El legalismo no es lo mismo en su manera de pensar; nada muestra más la debilidad del legalismo que cómo los legalistas tratan a aquellos que han pecado. Ellos simplemente atacan con reglas; no hay cuidado o amor, simplemente un mandamiento impetuoso de las reglas. Si traemos junto a nosotros a alguien en esta vida para cuidarnos y damos cuentas, la probabilidad de pecar es mucho menor.
El legalismo piensa en traer a otros junto a uno simplemente para hacer más de sí mismo. ¡Si los legalistas pueden hacer que la otra persona se vea mal, ellos se mirarán mejor! El dar cuentas nos permite mantener un modo de pensar estable acerca de nuestras situaciones y de nosotros mismos. Necesitamos mantener a alguien a nuestro lado de la manera correcta, para darnos otra perspectiva, para ayudarnos cuando estamos abajo. Esto nos permite ayudar a esa persona del mismo modo. ¡De esta manera cumplimos la ley de amarnos los unos a los otros!
6:6 El que es enseñado en la palabra, haga partícipe de toda cosa buena al que lo instruye.
6:7 No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.
6:8 Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.
6:9 No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.
A los creyentes se le dice que compartan sus vidas (esto incluye talentos, tiempo y dinero) con sus líderes / pastores / ancianos. La idea de dar libremente a un pastor era revolucionaria en ese entonces para los judíos. A los judíos se les impuso pagar el impuesto a sus sacerdotes; dar a los pastores era una ofrenda libre, no un mandamiento. Los pastores también son llamados para venir junto a otros creyentes y enseñarles. Juntos, la iglesia está para cuidar de los unos a los otros.
Si un cristiano está solo, la tentación de darse por vencido y caer en pecado es mucho más grande que si el creyente está con un grupo de creyentes. Somos llamados a ayudarnos unos a otros. Los cristianos nunca deberíamos tener la actitud “más santo que tu”, especialmente cuando ellos están ayudando a otro hermano, porque cual quiere Cristiano puede caer en cual quiere tentación.
Dios no puede ser engañado por alguna excusa que nosotros demos. Sea sacrificial o espiritual o simplemente tontería. Tú siempre cosechas lo que siembras. Si siembras semilla espiritual, recibirás fruto spiritual; si siembras semillas carnales, recibirás carnalmente, disgustos, corrupción, fruto podrido. No solo cosecharás lo que tú sembraste, tú siempre cosecharás más de lo que tú sembraste.
Aquellos que apelan a la carne y la siguen recibirán destrucción y corrupción. Cuando alguien dice “si” al pecado en su corazón, o en su mente o en sus acciones, ellos están plantando semillas de la carne. Por cuando decimos si a la obediencia amorosa, nosotros plantamos semillas del Espíritu. Esto puede ser hecho con amor. Es muy importante tener una mentalidad celestial cuando damos de nosotros mismos, de modo que no crezcamos fastidiados.
Definitivamente debemos estar dispuestos a continuar trabajando el bien que tenemos por delante. ¿Cuándo es el tiempo para esto? Ahora y ahora. Recuerda no tenemos garantizado otro segundo. Dios nos ha puesto aquí por una razón; tomar la oportunidad de amar a nuestro prójimo y amar a aquellos que están perdidos. Especialmente necesitamos hacer el bien con aquellos que están dentro de la familia de Dios, aquellos que están dentro de la iglesia.
6:11 Mirad con cuán grandes letras os escribo de mi propia mano.
6:12 Todos los que quieren agradar en la carne, éstos os obligan a que os circuncidéis, solamente para no padecer persecución a causa de la cruz de Cristo.
6:13 Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley; pero quieren que vosotros os circuncidéis, para gloriarse en vuestra carne.
6:14 Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.
6:15 Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale nada, ni la incircuncisión, sino una nueva creación.
6:16 Y a todos los que anden conforme a esta regla, paz y misericordia sea a ellos, y al Israel de Dios.
6:17 De aquí en adelante nadie me cause molestias; porque yo traigo en mi cuerpo las marcas del Señor Jesús.
6:18 Hermanos, la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu. Amén.
Pablo menciona que el escribe en grandes letras, esto probablemente signifique que Pablo mismo ha tomado la pluma en lugar de su secretario. También puede significar que él escribe en grandes letras debido a una enfermedad de los ojos. También puede ser que Pablo escribió la conclusión entera en letras capital por el bien del énfasis.
Aquellos que son legalistas son basados en obras. Su mentalidad es tener convertidos para hacerse ver mejor a ellos mismos. ¡Ellos desean jactarse acerca de sus obras! Ellos ven la verdad, pero no quieren ser perseguidos por sus compañeros. Pablo menciona que ellos mismos no cuidan toda la Ley, ¡porque es imposible!
Pablo, por el otro lado, no le interesa jactarse de sí mismo sino solo de Cristo. La circuncisión o incircuncisión no importan porque tan pronto como la salvación ocurre hay una nueva creación echa por Dios. El mundo no tiene poder sobre un cristiano porque nosotros estamos muertos a él. La Cruz fue un objeto de vergüenza para los judíos, pero para Pablo y para los cristianos es un objeto de gloria.
Pablo termina con un mandamiento para que ninguno lo moleste con falsos testimonios ya que él ha sido perseguido y trae las marcas en su cuerpo. Su prueba final fueron las marcas sobre su mismo cuerpo que él ha terminado perseguido por la verdad. Él menciona sus despedidas y termina su carta a los Gálatas.
¿Has visto como la ley no da la medida? No es a través de las tradiciones, obras o ir a la iglesia. Es solo a través de la Cruz y de la gracia de Cristo. Espero que este estudio te ayude a afirmar la verdad en tu misma vida.