Ustedes son Sus Discípulos
Estamos para REPRODUCIRNOS. (Mateo 28:16-20)
La Gran Comisión es nuestra Misión a reproducirnos nosotros mismos por medio de salvar a otros del infierno eterno y literal. Este es el cómo ser fieles a Dios a los mandamientos de Dios enseñando a otros lo que tú crees (2 Timoteo 2:2).
Jesús, nuestro ejemplo
No hay mejor maestro que el de un ejemplo, un testimonio claro. Las palabras son baratas; son nuestras acciones las que determinarán si la gente cree a tus palabras. Jesús fijó la norma de nuestro vivir: la perfección, o la santidad. Él nos llama a ser como Él es (1 Pedro 1:13-16). No solo Él fue Santo sino que Él nos ha mostrado el ejemplo de obediencia (Juan 17:4-9).
Aquí hay dos preguntas importantes parta ti; Sin estas dos preguntas contestadas, Yo dudo que llegues lejos en la disciplina de otros:
1. ¿Estás seguro en lo que tú crees?
2. ¿Es Jesús una persona real para tí?
Jesús nos mostró una meta excelente
Jesús no permitió que ninguna cosa lo desviara de plan hecho desde antes de la fundación del mundo. Nosotros deberíamos estar en la misma mentalidad. Nuestra meta es glorificar a Dios; una de las mejores maneras de hacer esto es por medio de decirle a otros del regalo maravilloso que está escondido en ti y en mi.
Si no tenemos una meta, viviremos sin propósito. “Aquellos que a nada le tiran le atinarán todo el tiempo” Nuestra meta e intento debe ser hacer discípulos. ¿Cuál es tu motivación diaria? ¿Tu siguiente pago? ¿Tus siguientes vacaciones? ¿Es Dios?
¿Cual es la gran comisión?
Simplemente pongámoslo así, es reproducirnos a nosotros mismos (espiritualmente) por:
1. Testificar y traer otros a Cristo
2. Bautizarlos
3. Disciplinarlos y enseñarles la Biblia
Jesús demostró éxito en Su mandamiento
Un discípulo es uno que es un cristiano y está creciendo en conformidad a Cristo. Ellos están trabajando para y en Cristo. Jesús fue capaz de conseguir 11 de 12 hombres para ser fieles. Él los preparó y los probó. Todos ellos desearon conocer más de Dios y quisieron que otros conocieran las Buenas nuevas y sean salvos.
Jesús les enseñó cómo ganar almas y orar, como conocer los conceptos básicos y enviarlos por su camino. Su vida les mostraba como actuar. Jesús nos dejó una misión para ser completada. ¿Darás fruto o serás cortado?
Estamos para REPRODUCIRNOS. (Mateo 28:16-20)
La Gran Comisión es nuestra Misión a reproducirnos nosotros mismos por medio de salvar a otros del infierno eterno y literal. Este es el cómo ser fieles a Dios a los mandamientos de Dios enseñando a otros lo que tú crees (2 Timoteo 2:2).
Jesús, nuestro ejemplo
No hay mejor maestro que el de un ejemplo, un testimonio claro. Las palabras son baratas; son nuestras acciones las que determinarán si la gente cree a tus palabras. Jesús fijó la norma de nuestro vivir: la perfección, o la santidad. Él nos llama a ser como Él es (1 Pedro 1:13-16). No solo Él fue Santo sino que Él nos ha mostrado el ejemplo de obediencia (Juan 17:4-9).
Aquí hay dos preguntas importantes parta ti; Sin estas dos preguntas contestadas, Yo dudo que llegues lejos en la disciplina de otros:
1. ¿Estás seguro en lo que tú crees?
2. ¿Es Jesús una persona real para tí?
Jesús nos mostró una meta excelente
Jesús no permitió que ninguna cosa lo desviara de plan hecho desde antes de la fundación del mundo. Nosotros deberíamos estar en la misma mentalidad. Nuestra meta es glorificar a Dios; una de las mejores maneras de hacer esto es por medio de decirle a otros del regalo maravilloso que está escondido en ti y en mi.
Si no tenemos una meta, viviremos sin propósito. “Aquellos que a nada le tiran le atinarán todo el tiempo” Nuestra meta e intento debe ser hacer discípulos. ¿Cuál es tu motivación diaria? ¿Tu siguiente pago? ¿Tus siguientes vacaciones? ¿Es Dios?
¿Cual es la gran comisión?
Simplemente pongámoslo así, es reproducirnos a nosotros mismos (espiritualmente) por:
1. Testificar y traer otros a Cristo
2. Bautizarlos
3. Disciplinarlos y enseñarles la Biblia
Jesús demostró éxito en Su mandamiento
Un discípulo es uno que es un cristiano y está creciendo en conformidad a Cristo. Ellos están trabajando para y en Cristo. Jesús fue capaz de conseguir 11 de 12 hombres para ser fieles. Él los preparó y los probó. Todos ellos desearon conocer más de Dios y quisieron que otros conocieran las Buenas nuevas y sean salvos.
Jesús les enseñó cómo ganar almas y orar, como conocer los conceptos básicos y enviarlos por su camino. Su vida les mostraba como actuar. Jesús nos dejó una misión para ser completada. ¿Darás fruto o serás cortado?