Juan 7:1-36
7:1 Después de estas cosas, andaba Jesús en Galilea; pues no quería andar en Judea, porque los judíos procuraban matarle.
7:2 Estaba cerca la fiesta de los judíos, la de los tabernáculos;
7:3 y le dijeron sus hermanos: Sal de aquí, y vete a Judea, para que también tus discípulos vean las obras que haces.
7:4 Porque ninguno que procura darse a conocer hace algo en secreto. Si estas cosas haces, manifiéstate al mundo.
7:5 Porque ni aun sus hermanos creían en él.
7:6 Entonces Jesús les dijo: Mi tiempo aún no ha llegado, mas vuestro tiempo siempre está presto.
7:7 No puede el mundo aborreceros a vosotros; mas a mí me aborrece, porque yo testifico de él, que sus obras son malas.
7:8 Subid vosotros a la fiesta; yo no subo todavía a esa fiesta, porque mi tiempo aún no se ha cumplido.
7:9 Y habiéndoles dicho esto, se quedó en Galilea.
Jesús estuvo en Galilea debido a que la gente en Judea lo estaba buscando para matarlo. La Fiesta de las tiendas estaba cerca y esta fue una fiesta donde todos los hombres en Israel debían presentarse a si mismos ante el Señor en el templo. Josefo (un historiador primitivo) llamó esta la más grande fiesta que Israel tuvo. Fue una celebración de su liberación de Egipto. Los más devotos de los judíos vivirían en tiendas por siete días, y esto le recordaría al pueblo de las andanzas de Israel en el desierto. Los medios hermanos de Jesús (hijos de José and María) le dijeron que fuera a todo el mundo para que conocieran quien era El. Ellos eran sus familiares y no creían en Él.
Jesús les explicó que el mundo lo odia porque Él le dice al mundo la verdad acerca de esto. ¿Has notado tú esto alguna vez? Si le has testificado a alguien, algunas personas automáticamente se enojan cuando empiezan a ver el estado en que verdaderamente ellos están. Ellos tratan de justificarse a si mismos ante los hombres, y empiezan a compararse a si mismos con otros que están en la misma condición. Pero hagamos esto un poco más claro. El mundo no es el estándar para la moralidad del mundo, El Dios santo lo es. Él es 100% moralmente puro, y nosotros no los somos definitivamente. Debemos recordar lo que nos muestra este pasaje, la proximidad con Jesús nos hace creyentes. Si tu estás físicamente próximo a Jesús (una iglesia, hacer buenas obras, etc.) esto no te garantiza la salvación. Sólo poner toda tu confianza y arrepentirte (cambiar de tu pasado hacia los mandamientos de Dios por empezar a desarrollar una actitud de Dios hacia el pecado) trae la salvación en Jesús.
Jesús les dijo a sus hermanos que Él no iría a la fiesta todavía (todavía en Griego). Esto simplemente significa que el tiempo de Jesús no era el mismo tiempo de sus hermanos. Por lo tanto, Él esperó que Dios le dijera que fuera.
7:10 Pero después que sus hermanos habían subido, entonces él también subió a la fiesta, no abiertamente, sino como en secreto.
7:11 Y le buscaban los judíos en la fiesta, y decían: ¿Dónde está aquél?
7:12 Y había gran murmullo acerca de él entre la multitud, pues unos decían: Es bueno; pero otros decían: No, sino que engaña al pueblo.
7:13 Pero ninguno hablaba abiertamente de él, por miedo a los judíos.
Después de que sus hermanos se fueron, Jesús vino a la fiesta en secreto. Los Judíos (o lo dirigentes religiosos) lo estaban buscando. Entre las multitudes, muchos habían empezado a debatir quietamente quien era Él. Todavía, ninguno de la gente hablaba abiertamente porque estaban temerosos de los Líderes judíos.
7:14 Mas a la mitad de la fiesta subió Jesús al templo, y enseñaba.
7:15 Y se maravillaban los judíos, diciendo: ¿Cómo sabe éste letras, sin haber estudiado?
7:16 Jesús les respondió y dijo: Mi doctrina no es mía, sino de aquel que me envió.
7:17 El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios, o si yo hablo por mi propia cuenta.
7:18 El que habla por su propia cuenta, su propia gloria busca; pero el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero, y no hay en él injusticia.
7:19 ¿No os dio Moisés la ley, y ninguno de vosotros cumple la ley? ¿Por qué procuráis matarme?
En medio de la fiesta vino Jesús al templo y enseñaba. Los judíos estaban asombrados por su conocimiento ya que él nunca había sido educado en una de sus “escuelas rabínicas”. Jesús les respondió sus preguntas que estaban en sus mentes diciéndoles que Él no estaba enseñando por su propia cuenta. Él no estaba hablando como muchos lo hacen, para su propia gloria, exaltándose a si mismos o para su propia causa. Jesús enseñó para la gloria del Padre. El termina y responde con una pregunta sobre por qué estaban ellos buscando matarlo.
7:1 Después de estas cosas, andaba Jesús en Galilea; pues no quería andar en Judea, porque los judíos procuraban matarle.
7:2 Estaba cerca la fiesta de los judíos, la de los tabernáculos;
7:3 y le dijeron sus hermanos: Sal de aquí, y vete a Judea, para que también tus discípulos vean las obras que haces.
7:4 Porque ninguno que procura darse a conocer hace algo en secreto. Si estas cosas haces, manifiéstate al mundo.
7:5 Porque ni aun sus hermanos creían en él.
7:6 Entonces Jesús les dijo: Mi tiempo aún no ha llegado, mas vuestro tiempo siempre está presto.
7:7 No puede el mundo aborreceros a vosotros; mas a mí me aborrece, porque yo testifico de él, que sus obras son malas.
7:8 Subid vosotros a la fiesta; yo no subo todavía a esa fiesta, porque mi tiempo aún no se ha cumplido.
7:9 Y habiéndoles dicho esto, se quedó en Galilea.
Jesús estuvo en Galilea debido a que la gente en Judea lo estaba buscando para matarlo. La Fiesta de las tiendas estaba cerca y esta fue una fiesta donde todos los hombres en Israel debían presentarse a si mismos ante el Señor en el templo. Josefo (un historiador primitivo) llamó esta la más grande fiesta que Israel tuvo. Fue una celebración de su liberación de Egipto. Los más devotos de los judíos vivirían en tiendas por siete días, y esto le recordaría al pueblo de las andanzas de Israel en el desierto. Los medios hermanos de Jesús (hijos de José and María) le dijeron que fuera a todo el mundo para que conocieran quien era El. Ellos eran sus familiares y no creían en Él.
Jesús les explicó que el mundo lo odia porque Él le dice al mundo la verdad acerca de esto. ¿Has notado tú esto alguna vez? Si le has testificado a alguien, algunas personas automáticamente se enojan cuando empiezan a ver el estado en que verdaderamente ellos están. Ellos tratan de justificarse a si mismos ante los hombres, y empiezan a compararse a si mismos con otros que están en la misma condición. Pero hagamos esto un poco más claro. El mundo no es el estándar para la moralidad del mundo, El Dios santo lo es. Él es 100% moralmente puro, y nosotros no los somos definitivamente. Debemos recordar lo que nos muestra este pasaje, la proximidad con Jesús nos hace creyentes. Si tu estás físicamente próximo a Jesús (una iglesia, hacer buenas obras, etc.) esto no te garantiza la salvación. Sólo poner toda tu confianza y arrepentirte (cambiar de tu pasado hacia los mandamientos de Dios por empezar a desarrollar una actitud de Dios hacia el pecado) trae la salvación en Jesús.
Jesús les dijo a sus hermanos que Él no iría a la fiesta todavía (todavía en Griego). Esto simplemente significa que el tiempo de Jesús no era el mismo tiempo de sus hermanos. Por lo tanto, Él esperó que Dios le dijera que fuera.
7:10 Pero después que sus hermanos habían subido, entonces él también subió a la fiesta, no abiertamente, sino como en secreto.
7:11 Y le buscaban los judíos en la fiesta, y decían: ¿Dónde está aquél?
7:12 Y había gran murmullo acerca de él entre la multitud, pues unos decían: Es bueno; pero otros decían: No, sino que engaña al pueblo.
7:13 Pero ninguno hablaba abiertamente de él, por miedo a los judíos.
Después de que sus hermanos se fueron, Jesús vino a la fiesta en secreto. Los Judíos (o lo dirigentes religiosos) lo estaban buscando. Entre las multitudes, muchos habían empezado a debatir quietamente quien era Él. Todavía, ninguno de la gente hablaba abiertamente porque estaban temerosos de los Líderes judíos.
7:14 Mas a la mitad de la fiesta subió Jesús al templo, y enseñaba.
7:15 Y se maravillaban los judíos, diciendo: ¿Cómo sabe éste letras, sin haber estudiado?
7:16 Jesús les respondió y dijo: Mi doctrina no es mía, sino de aquel que me envió.
7:17 El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios, o si yo hablo por mi propia cuenta.
7:18 El que habla por su propia cuenta, su propia gloria busca; pero el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero, y no hay en él injusticia.
7:19 ¿No os dio Moisés la ley, y ninguno de vosotros cumple la ley? ¿Por qué procuráis matarme?
En medio de la fiesta vino Jesús al templo y enseñaba. Los judíos estaban asombrados por su conocimiento ya que él nunca había sido educado en una de sus “escuelas rabínicas”. Jesús les respondió sus preguntas que estaban en sus mentes diciéndoles que Él no estaba enseñando por su propia cuenta. Él no estaba hablando como muchos lo hacen, para su propia gloria, exaltándose a si mismos o para su propia causa. Jesús enseñó para la gloria del Padre. El termina y responde con una pregunta sobre por qué estaban ellos buscando matarlo.
7:20 Respondió la multitud y dijo: Demonio tienes; ¿quién procura matarte?
7:21 Jesús respondió y les dijo: Una obra hice, y todos os maravilláis.
7:22 Por cierto, Moisés os dio la circuncisión (no porque sea de Moisés, sino de los padres); y en el día de reposo circuncidáis al hombre.
7:23 Si recibe el hombre la circuncisión en el día de reposo, para que la ley de Moisés no sea quebrantada, ¿os enojáis conmigo porque en el día de reposo sané completamente a un hombre?
7:24 No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio.
7:25 Decían entonces unos de Jerusalén: ¿No es éste a quien buscan para matarle?
7:26 Pues mirad, habla públicamente, y no le dicen nada. ¿Habrán reconocido en verdad los gobernantes que éste es el Cristo?
7:27 Pero éste, sabemos de dónde es; mas cuando venga el Cristo, nadie sabrá de dónde sea.
La multitud estaba confundida, lo llamaron poseído y le preguntaron que porque dijo que ellos estaban buscando matarlo. Jesús les explicó sus pensamientos equivocados. Los judíos circuncidaban en el Sabbat por que la circuncisión era más grande a sus ojos que el Sabbat. La circuncisión implicaba que tú eras un judío y que esto necesitaba ser hecho (recuerde que esta fue la primera cosa hecha por Abraham; es fechada antes que Moisés). Ellos estaban buscando matar a Jesús porque Él había sanado a alguien en el Sabbat. Deberían estar regocijándose, no juzgandolo. Él les dice a aquellos presentes que no juzguen según las apariencias sino que tomen todos lo hechos en cuenta primero y luego hagan un juicio justo.
Algunas de las personas finalmente reconocieron quien era Jesús y que había sido rechazado por los gobernantes. Algunos empezaron a pensar en la posibilidad de que Jesús fuera el Mesías. Ellos derivaron que Él era de Galilea y por lo tanto Él no podría ser el Mesías porque el origen del Mesías sería conocido hasta Su aparición.
7:28 Jesús entonces, enseñando en el templo, alzó la voz y dijo: A mí me conocéis, y sabéis de dónde soy; y no he venido de mí mismo, pero el que me envió es verdadero, a quien vosotros no conocéis.
7:29 Pero yo le conozco, porque de él procedo, y él me envió.
7:30 Entonces procuraban prenderle; pero ninguno le echó mano, porque aún no había llegado su hora.
7:31 Y muchos de la multitud creyeron en él, y decían: El Cristo, cuando venga, ¿hará más señales que las que éste hace?
Jesús aclaró que el venía del Padre, y que ellos no lo conocían a Él ni al que lo envió. Esta fue una refutación de sus pensamientos previos acerca de dónde vino Él. Esto hizo que quisieran agarrarlo y arrestarlo, pero ninguno pudo tomarlo porque aun no era el tiempo para morir. Algunos de la multitud creyeron en Él y apelaron a sus milagros como señales que mostraban que Él era el Mesías.
7:32 Los fariseos oyeron a la gente que murmuraba de él estas cosas; y los principales sacerdotes y los fariseos enviaron alguaciles para que le prendiesen.
7:33 Entonces Jesús dijo: Todavía un poco de tiempo estaré con vosotros, e iré al que me envió.
7:34 Me buscaréis, y no me hallaréis; y a donde yo estaré, vosotros no podréis venir.
7:35 Entonces los judíos dijeron entre sí: ¿Adónde se irá éste, que no le hallemos? ¿Se irá a los dispersos entre los griegos, y enseñará a los griegos?
7:36 ¿Qué significa esto que dijo: Me buscaréis, y no me hallaréis; y a donde yo estaré, vosotros no podréis venir?
Los líderes oyeron esta murmuración acerca de Jesús como Mesías y enviaron a sus oficiales para arrestarlo. Jesús acabó su enseñanza diciendo a los presentes que Él estaría allí (en la Tierra) un poco más y entonces retornaría al Padre. Y que no lo encontrarían aunque lo buscaran.
Los judíos (pensando físicamente) estaban muy confundidos por esta declaración. Por mucho de eso ellos empezaron a suponer que Jesús iría a enseñarle a los griegos. Aún ahora, el pueblo Judío como un todo está esperando a su Mesías. Muchos están atorados aún en sus tradiciones antiguas y en la espera del Mesías que quieren que venga. ¿Estás buscando al Mesías para la salvación del pecado y de la muerte? Jesús es el único Mesías verdadero en toda la historia del mundo. Si tu aun no crees, mantente leyendo, la palabra de Dios puede liberar tu bloqueo mental. El bloqueo de la voluntad, del pensamiento, este únicamente puede ser levantado por ti. Para aquellos que son salvos y conocen esto, ¡vivan como esto! ¡Muéstrale al mundo! ¡Aprende más de Su Palabra diariamente y enséñalo / muéstralo a otros!
7:21 Jesús respondió y les dijo: Una obra hice, y todos os maravilláis.
7:22 Por cierto, Moisés os dio la circuncisión (no porque sea de Moisés, sino de los padres); y en el día de reposo circuncidáis al hombre.
7:23 Si recibe el hombre la circuncisión en el día de reposo, para que la ley de Moisés no sea quebrantada, ¿os enojáis conmigo porque en el día de reposo sané completamente a un hombre?
7:24 No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio.
7:25 Decían entonces unos de Jerusalén: ¿No es éste a quien buscan para matarle?
7:26 Pues mirad, habla públicamente, y no le dicen nada. ¿Habrán reconocido en verdad los gobernantes que éste es el Cristo?
7:27 Pero éste, sabemos de dónde es; mas cuando venga el Cristo, nadie sabrá de dónde sea.
La multitud estaba confundida, lo llamaron poseído y le preguntaron que porque dijo que ellos estaban buscando matarlo. Jesús les explicó sus pensamientos equivocados. Los judíos circuncidaban en el Sabbat por que la circuncisión era más grande a sus ojos que el Sabbat. La circuncisión implicaba que tú eras un judío y que esto necesitaba ser hecho (recuerde que esta fue la primera cosa hecha por Abraham; es fechada antes que Moisés). Ellos estaban buscando matar a Jesús porque Él había sanado a alguien en el Sabbat. Deberían estar regocijándose, no juzgandolo. Él les dice a aquellos presentes que no juzguen según las apariencias sino que tomen todos lo hechos en cuenta primero y luego hagan un juicio justo.
Algunas de las personas finalmente reconocieron quien era Jesús y que había sido rechazado por los gobernantes. Algunos empezaron a pensar en la posibilidad de que Jesús fuera el Mesías. Ellos derivaron que Él era de Galilea y por lo tanto Él no podría ser el Mesías porque el origen del Mesías sería conocido hasta Su aparición.
7:28 Jesús entonces, enseñando en el templo, alzó la voz y dijo: A mí me conocéis, y sabéis de dónde soy; y no he venido de mí mismo, pero el que me envió es verdadero, a quien vosotros no conocéis.
7:29 Pero yo le conozco, porque de él procedo, y él me envió.
7:30 Entonces procuraban prenderle; pero ninguno le echó mano, porque aún no había llegado su hora.
7:31 Y muchos de la multitud creyeron en él, y decían: El Cristo, cuando venga, ¿hará más señales que las que éste hace?
Jesús aclaró que el venía del Padre, y que ellos no lo conocían a Él ni al que lo envió. Esta fue una refutación de sus pensamientos previos acerca de dónde vino Él. Esto hizo que quisieran agarrarlo y arrestarlo, pero ninguno pudo tomarlo porque aun no era el tiempo para morir. Algunos de la multitud creyeron en Él y apelaron a sus milagros como señales que mostraban que Él era el Mesías.
7:32 Los fariseos oyeron a la gente que murmuraba de él estas cosas; y los principales sacerdotes y los fariseos enviaron alguaciles para que le prendiesen.
7:33 Entonces Jesús dijo: Todavía un poco de tiempo estaré con vosotros, e iré al que me envió.
7:34 Me buscaréis, y no me hallaréis; y a donde yo estaré, vosotros no podréis venir.
7:35 Entonces los judíos dijeron entre sí: ¿Adónde se irá éste, que no le hallemos? ¿Se irá a los dispersos entre los griegos, y enseñará a los griegos?
7:36 ¿Qué significa esto que dijo: Me buscaréis, y no me hallaréis; y a donde yo estaré, vosotros no podréis venir?
Los líderes oyeron esta murmuración acerca de Jesús como Mesías y enviaron a sus oficiales para arrestarlo. Jesús acabó su enseñanza diciendo a los presentes que Él estaría allí (en la Tierra) un poco más y entonces retornaría al Padre. Y que no lo encontrarían aunque lo buscaran.
Los judíos (pensando físicamente) estaban muy confundidos por esta declaración. Por mucho de eso ellos empezaron a suponer que Jesús iría a enseñarle a los griegos. Aún ahora, el pueblo Judío como un todo está esperando a su Mesías. Muchos están atorados aún en sus tradiciones antiguas y en la espera del Mesías que quieren que venga. ¿Estás buscando al Mesías para la salvación del pecado y de la muerte? Jesús es el único Mesías verdadero en toda la historia del mundo. Si tu aun no crees, mantente leyendo, la palabra de Dios puede liberar tu bloqueo mental. El bloqueo de la voluntad, del pensamiento, este únicamente puede ser levantado por ti. Para aquellos que son salvos y conocen esto, ¡vivan como esto! ¡Muéstrale al mundo! ¡Aprende más de Su Palabra diariamente y enséñalo / muéstralo a otros!