Juan 16:1-33
16:1 Estas cosas os he hablado, para que no tengáis tropiezo.
16:2 Os expulsarán de las sinagogas; y aun viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios.
16:3 Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mí.
16:4 Mas os he dicho estas cosas, para que cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho. Esto no os lo dije al principio, porque yo estaba con vosotros.
Jesús les dijo a ellos sobre su propio futuro. Ellos serían perseguidos por su creencia en Jesús como Dios. Ellos serían sacados fuera de la sociedad normal. Aquellos que los perseguirían a ellos creerían que le estaban haciendo un favor a Dios. Ellos harían esto porque ellos no conocerían la verdad de que Jesús es Señor. Los primeros cristianos fueron perseguidos y muchos aun martirizados por su creencia en la verdad. Él les dice a esto Sus discípulos porque Su tiempo para partir de ellos estaba muy cerca.
¿Has sido perseguido a causa de tu fe? ¿Has sido odiado por otros porque crees en la Biblia y solamente en la Biblia? Jesús dio esta advertencia a Sus discípulos, y Él nos la da a nosotros para que podamos reconocer su conocimiento del futuro. No hay nada fuera del control de Dios. Todo lo que está sobre nuestras cabezas está bajo Sus pies.
16:5 Pero ahora voy al que me envió; y ninguno de vosotros me pregunta: ¿A dónde vas?
16:6 Antes, porque os he dicho estas cosas, tristeza ha llenado vuestro corazón.
16:7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.
16:8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.
16:9 De pecado, por cuanto no creen en mí;
16:10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;
16:11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.
La partida de Jesús pudo haber servido como una fuente de depresión para los discípulos. Si ellos pudieran entender por qué Jesús les estaba dejando, ellos hubieran estado regocijándose porque Él estaba finalmente yendo a tratar con el problema del pecado y de la muerte de una vez por todas. Jesús les estaría dejando después para ser entronado a la mano derecha de Dios. La cuestión inmediata era su problema personal; su Amo y Maestro les estaba dejando. Sin la partida de Jesús de Sus discípulos, no habría evangelio, ni expiación (o pago) por los pecados.
Con la partida de Jesús, el Espíritu Santo estaría descansando permanentemente sobre los cristianos. La palabra “consolador” aquí traduce al griego como parakletos. Esto tuvo significancia en el mundo griego de una asistente legal que aboga una causa. La gente pronto miraría a Jesús como nada más que un criminal, pero la resurrección y la ascensión mostrarían al mundo la verdad: Él es el Salvador y Mesías del mundo. El Espíritu también convence a los hombres de sus falsas visiones. Como podemos ver, esto fue para nuestro beneficio que Jesús dejó a los discípulos para que pudiéramos recibir el Espíritu Santo y la salvación. Este ayudador ayudaría a los cristianos de varias maneras. El Espíritu convencería al mundo su culpa o presentaría los hechos al mundo de su culpa y de su pecado. ¡Las cosas mostradas aquí son solo algunas de las cosas que el Espíritu Santo hace! Luego bucearemos dentro de esto cuando hablemos de la doctrina del Espíritu Santo.
16:12 Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar.
16:13 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.
16:14 El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.
16:15 Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.
Jesús no revelaría más verdades espirituales en ese tiempo. Estoy seguro que ellos vieron su oportunidad de reinar como un reino terrenal deteriorando delante de sus ojos. Ellos habian sido confrontados con esto y con su misma próxima traición y con las nuevas de un traidor en medio de ellos. Cuando el tiempo estaba en su punto, el Espíritu de Verdad o el Espíritu Santo revelaría toda la verdad acerca de Jesús y Su obra para ellos directamente de Dios el Padre. Vemos a la Divinidad (Trinidad) glorificar uno a Otro en el despliegue de la verdad a la humanidad. Jesús glorificó al Padre, y el Espíritu Santo glorificaría a Jesús.
16:16 Todavía un poco, y no me veréis; y de nuevo un poco, y me veréis; porque yo voy al Padre.
16:17 Entonces se dijeron algunos de sus discípulos unos a otros: ¿Qué es esto que nos dice: Todavía un poco y no me veréis; y de nuevo un poco, y me veréis; y, porque yo voy al Padre?
16:18 Decían, pues: ¿Qué quiere decir con: Todavía un poco? No entendemos lo que habla.
Jesús les dijo a ellos que estaría dejándolos pero sólo por un tiempo. Ellos lo mirarían de nuevo. Esto se refiere al tiempo en que Él moriría y regresaría a ellos por cuarenta días en Su cuerpo resucitado. Los discípulos estaban completamente confundidos por todas las declaraciones de Jesús. Ellos no podían conciliar que ellos no lo mirarían en poco tiempo con que Él estaría yendo al Padre. Esto se aclararía solo en retrospectiva.
¿Qué otro profeta ha hecho esto? ¡Él profetizó Su propia muerte, resurrección y ascensión! ¡Como ningún otro!
16:19 Jesús conoció que querían preguntarle, y les dijo: ¿Preguntáis entre vosotros acerca de esto que dije: Todavía un poco y no me veréis, y de nuevo un poco y me veréis?
16:20 De cierto, de cierto os digo, que vosotros lloraréis y lamentaréis, y el mundo se alegrará; pero aunque vosotros estéis tristes, vuestra tristeza se convertirá en gozo.
16:21 La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque ha llegado su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo.
16:22 También vosotros ahora tenéis tristeza; pero os volveré a ver, y se gozará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestro gozo.
16:23 En aquel día no me preguntaréis nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo dará.
16:24 Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido.
Jesús sabía de la confusión de Sus estudiantes. Les explicó que ellos sentirían dolor en verdad, pero esa pena sería cambiada en gozo. Su muerte sería dolorosa para ellos pero Su muerte traería gran alegría en el mundo. PERO, cuando Él resucitara, los discípulos experimentarían un gozo que nadie podría quitarles. Él iba destruir las cadenas del pecado por todo el tiempo para aquellos que simplemente lo aceptan a Él. Él usó el ejemplo de una madre en la labor de tener un niño para explicar lo que ellos experimentarían.
16:1 Estas cosas os he hablado, para que no tengáis tropiezo.
16:2 Os expulsarán de las sinagogas; y aun viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios.
16:3 Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mí.
16:4 Mas os he dicho estas cosas, para que cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho. Esto no os lo dije al principio, porque yo estaba con vosotros.
Jesús les dijo a ellos sobre su propio futuro. Ellos serían perseguidos por su creencia en Jesús como Dios. Ellos serían sacados fuera de la sociedad normal. Aquellos que los perseguirían a ellos creerían que le estaban haciendo un favor a Dios. Ellos harían esto porque ellos no conocerían la verdad de que Jesús es Señor. Los primeros cristianos fueron perseguidos y muchos aun martirizados por su creencia en la verdad. Él les dice a esto Sus discípulos porque Su tiempo para partir de ellos estaba muy cerca.
¿Has sido perseguido a causa de tu fe? ¿Has sido odiado por otros porque crees en la Biblia y solamente en la Biblia? Jesús dio esta advertencia a Sus discípulos, y Él nos la da a nosotros para que podamos reconocer su conocimiento del futuro. No hay nada fuera del control de Dios. Todo lo que está sobre nuestras cabezas está bajo Sus pies.
16:5 Pero ahora voy al que me envió; y ninguno de vosotros me pregunta: ¿A dónde vas?
16:6 Antes, porque os he dicho estas cosas, tristeza ha llenado vuestro corazón.
16:7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.
16:8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.
16:9 De pecado, por cuanto no creen en mí;
16:10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;
16:11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.
La partida de Jesús pudo haber servido como una fuente de depresión para los discípulos. Si ellos pudieran entender por qué Jesús les estaba dejando, ellos hubieran estado regocijándose porque Él estaba finalmente yendo a tratar con el problema del pecado y de la muerte de una vez por todas. Jesús les estaría dejando después para ser entronado a la mano derecha de Dios. La cuestión inmediata era su problema personal; su Amo y Maestro les estaba dejando. Sin la partida de Jesús de Sus discípulos, no habría evangelio, ni expiación (o pago) por los pecados.
Con la partida de Jesús, el Espíritu Santo estaría descansando permanentemente sobre los cristianos. La palabra “consolador” aquí traduce al griego como parakletos. Esto tuvo significancia en el mundo griego de una asistente legal que aboga una causa. La gente pronto miraría a Jesús como nada más que un criminal, pero la resurrección y la ascensión mostrarían al mundo la verdad: Él es el Salvador y Mesías del mundo. El Espíritu también convence a los hombres de sus falsas visiones. Como podemos ver, esto fue para nuestro beneficio que Jesús dejó a los discípulos para que pudiéramos recibir el Espíritu Santo y la salvación. Este ayudador ayudaría a los cristianos de varias maneras. El Espíritu convencería al mundo su culpa o presentaría los hechos al mundo de su culpa y de su pecado. ¡Las cosas mostradas aquí son solo algunas de las cosas que el Espíritu Santo hace! Luego bucearemos dentro de esto cuando hablemos de la doctrina del Espíritu Santo.
16:12 Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar.
16:13 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.
16:14 El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.
16:15 Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.
Jesús no revelaría más verdades espirituales en ese tiempo. Estoy seguro que ellos vieron su oportunidad de reinar como un reino terrenal deteriorando delante de sus ojos. Ellos habian sido confrontados con esto y con su misma próxima traición y con las nuevas de un traidor en medio de ellos. Cuando el tiempo estaba en su punto, el Espíritu de Verdad o el Espíritu Santo revelaría toda la verdad acerca de Jesús y Su obra para ellos directamente de Dios el Padre. Vemos a la Divinidad (Trinidad) glorificar uno a Otro en el despliegue de la verdad a la humanidad. Jesús glorificó al Padre, y el Espíritu Santo glorificaría a Jesús.
16:16 Todavía un poco, y no me veréis; y de nuevo un poco, y me veréis; porque yo voy al Padre.
16:17 Entonces se dijeron algunos de sus discípulos unos a otros: ¿Qué es esto que nos dice: Todavía un poco y no me veréis; y de nuevo un poco, y me veréis; y, porque yo voy al Padre?
16:18 Decían, pues: ¿Qué quiere decir con: Todavía un poco? No entendemos lo que habla.
Jesús les dijo a ellos que estaría dejándolos pero sólo por un tiempo. Ellos lo mirarían de nuevo. Esto se refiere al tiempo en que Él moriría y regresaría a ellos por cuarenta días en Su cuerpo resucitado. Los discípulos estaban completamente confundidos por todas las declaraciones de Jesús. Ellos no podían conciliar que ellos no lo mirarían en poco tiempo con que Él estaría yendo al Padre. Esto se aclararía solo en retrospectiva.
¿Qué otro profeta ha hecho esto? ¡Él profetizó Su propia muerte, resurrección y ascensión! ¡Como ningún otro!
16:19 Jesús conoció que querían preguntarle, y les dijo: ¿Preguntáis entre vosotros acerca de esto que dije: Todavía un poco y no me veréis, y de nuevo un poco y me veréis?
16:20 De cierto, de cierto os digo, que vosotros lloraréis y lamentaréis, y el mundo se alegrará; pero aunque vosotros estéis tristes, vuestra tristeza se convertirá en gozo.
16:21 La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque ha llegado su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo.
16:22 También vosotros ahora tenéis tristeza; pero os volveré a ver, y se gozará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestro gozo.
16:23 En aquel día no me preguntaréis nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo dará.
16:24 Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido.
Jesús sabía de la confusión de Sus estudiantes. Les explicó que ellos sentirían dolor en verdad, pero esa pena sería cambiada en gozo. Su muerte sería dolorosa para ellos pero Su muerte traería gran alegría en el mundo. PERO, cuando Él resucitara, los discípulos experimentarían un gozo que nadie podría quitarles. Él iba destruir las cadenas del pecado por todo el tiempo para aquellos que simplemente lo aceptan a Él. Él usó el ejemplo de una madre en la labor de tener un niño para explicar lo que ellos experimentarían.
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16:25 Estas cosas os he hablado en alegorías; la hora viene cuando ya no os hablaré por alegorías, sino que claramente os anunciaré acerca del Padre.
16:26 En aquel día pediréis en mi nombre; y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros,
16:27 pues el Padre mismo os ama, porque vosotros me habéis amado, y habéis creído que yo salí de Dios.
16:28 Salí del Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre.
Los discípulos estaban aún limitados para entender las palabras de Jesús en muchas ocasiones. Él les habló a los Suyos mucho más plenamente después de la resurrección. Ellos gozarían la claridad del entendimiento, el acceso al Padre a través del Hijo, y Ellos serán hijos de Dios. ¿Suena familiar? ¡Somos lo mismo!
16:29 Le dijeron sus discípulos: He aquí ahora hablas claramente, y ninguna alegoría dices.
16:30 Ahora entendemos que sabes todas las cosas, y no necesitas que nadie te pregunte; por esto creemos que has salido de Dios.
16:31 Jesús les respondió: ¿Ahora creéis?
16:32 He aquí la hora viene, y ha venido ya, en que seréis esparcidos cada uno por su lado, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo.
16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Los discípulos pretendieron conocer acerca de lo que Jesús estaba hablando (Yo realmente lo dudo mucho que entendieron). Lo más que ellos pudieron entender fue que Jesús era omnisciente (“Tú conoces todas las cosas,”) y que Él vino de Dios.
Jesús conoció las limitaciones de los discípulos y les dijo que ellos pronto lo abandonarían y serían dispersos. Esto sería el cumplimiento de Zacarías 13:7. Jesús estaría solo en este mundo, pero el Padre estaría con Él, aunque el Padre abandona a Jesús en la cruz (Mateo 27:46). Somos cristianos que estamos en el mundo; la cosa buena es que Jesús ya ha vencido al mundo. Porque Él ha vencido, nosotros podemos también vencer a través de Él.
Esta sección concluye el tiempo en el Aposento Alto o aún quizás el tiempo que Jesús anduvo caminando con los discípulos hacia el Jardín de Getsemaní. El tiempo de Jesús estaba a la mano…
16:26 En aquel día pediréis en mi nombre; y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros,
16:27 pues el Padre mismo os ama, porque vosotros me habéis amado, y habéis creído que yo salí de Dios.
16:28 Salí del Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre.
Los discípulos estaban aún limitados para entender las palabras de Jesús en muchas ocasiones. Él les habló a los Suyos mucho más plenamente después de la resurrección. Ellos gozarían la claridad del entendimiento, el acceso al Padre a través del Hijo, y Ellos serán hijos de Dios. ¿Suena familiar? ¡Somos lo mismo!
16:29 Le dijeron sus discípulos: He aquí ahora hablas claramente, y ninguna alegoría dices.
16:30 Ahora entendemos que sabes todas las cosas, y no necesitas que nadie te pregunte; por esto creemos que has salido de Dios.
16:31 Jesús les respondió: ¿Ahora creéis?
16:32 He aquí la hora viene, y ha venido ya, en que seréis esparcidos cada uno por su lado, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo.
16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Los discípulos pretendieron conocer acerca de lo que Jesús estaba hablando (Yo realmente lo dudo mucho que entendieron). Lo más que ellos pudieron entender fue que Jesús era omnisciente (“Tú conoces todas las cosas,”) y que Él vino de Dios.
Jesús conoció las limitaciones de los discípulos y les dijo que ellos pronto lo abandonarían y serían dispersos. Esto sería el cumplimiento de Zacarías 13:7. Jesús estaría solo en este mundo, pero el Padre estaría con Él, aunque el Padre abandona a Jesús en la cruz (Mateo 27:46). Somos cristianos que estamos en el mundo; la cosa buena es que Jesús ya ha vencido al mundo. Porque Él ha vencido, nosotros podemos también vencer a través de Él.
Esta sección concluye el tiempo en el Aposento Alto o aún quizás el tiempo que Jesús anduvo caminando con los discípulos hacia el Jardín de Getsemaní. El tiempo de Jesús estaba a la mano…